Tres surfistas que han recorrido el mundo tras las olas juntan sus caminos en Matanzas. Cada uno carga una historia y una búsqueda, un vacío existencial que intentarán resolver en este nostálgico paraje. Allí, conviven con los habitantes del pueblo: los rudos pescadores de la caleta, pletóricos de anécdotas salvajes; un solitario bibliotecario, que guarda los oscuros secretos de Levallois, un ex miembro de la Legión Extranjera que extravió su destino en Matanzas; y el hijo de éste, Arturo, devenido en una especia de ermitaño predicador. Bajo el arrullo de las olas, un crimen inesperado se gesta en Matanzas; a partir de extractos judiciales, informes médicos y testimonios, la novela intenta reconstruir las motivaciones de este acto tan radical como desesperado.
Lee aquí Levallois, un fragmento de la novela «Matanzas, de Francisco Morales

El perspectivismo cervantino nos demuestra que la realidad no es unívoca, sino que se va construyendo con los relatos, testimonios y hasta de las percepciones y sentimientos que cada uno de los testigos o involucrados van relatando del hecho en cuestión. La vida misma se va construyendo no en forma individual y aislada, sino en conjunto, combinando los relatos de todos los sujetos, con sus discursos cargados de su interioridad.