Por Francisco Ortega.
Texto leído en la presentación del libro «La ciudad de los hoteles vacíos», en librería Qué Leo Ñuñoa.
- Leer la página 161 del libro, Rock River, ¿un cuento, un adelanto, da lo mismo? Lean esa página.
- La forma de Gonzalo Baeza: un secreto bien guardado. Un rumor de redes sociales y redes reales. Un libro que pasó de boca a boca, por que pasó de boca a boca en esa primera edición. Un libro de carretera, de lugares en medio de la nada.
- Baeza es un escritor que busca lectores. Lectores que buscan descubrir a Baeza.
- El lugar común del no lugar, acá en verdad hay no lugares. Un Greyhound de vidrios ahumados es más no lugar que un aeropuerto, pero el más no lugar de todos son las propias personas y acá en este volumen hay muchas personas no lugares.
- Los emigrantes son países en movimiento. Un país en una persona que ese mueve de un lugar a otro, un país que se mueve dentro de otro país, un país que busca esa ciudad de los hoteles vacíos para quedarse… Al menos por un par de horas.
- Hay dos tipos de escritores, el que lee y el que sabe leer. Gonzalo sabe leer y sobre todo sabe leer un país. O en este caso, dos países: Chile y EE UU. Literatura dura, extraña, desconocida, mal llamada de culto, urbana con lo urbano que no significa precisamente gran ciudad.
- Gonzalo Baeza no es un escritor flojo. Estos son 14 cuentos. Bastante más que el promedio de un libro de cuentos. Hoy cualquiera arma un libro de cuentos con 5 o 6 cuentos, así que este libro es una inversión. O quizá una novela fragmentada. Un LP de prog rock, nada de indie rock. En “La Ciudad de los Hoteles Vacíos” hay solos de guitarra, blues, y baterías de doble bombo.
- La forma de la basura. La cultura pop no es mencionar canciones y películas, eso es citar, almacenar, nerdear. Cultura pop es interpretar la basura que nos rodea, entender por qué las series de HBO tienen ese discurso, porque el género negro tiene cigarrillos o porque las grandes canciones son canciones tristes. En esa lectura “La Ciudad” es un libro muy pop; pero de ese pop, del que no necesita listas de itunes para mostrar su banda sonora.
- A Gonzalo le gusta el boxeo y estos son cuentos que boxean. “Me dejó por Jesucristo” es eso, un cuento de hombres sensibles, de cowboys duros pero que bajo esa dureza están hechos un trapo. La forma del trapo, vaya como pega un puñetazo en la guata ese cuento. El final de ese cuento: “dólares de ahorros, para que te compres algo en el viaje”. Las imágenes de Cristo según Hollywood. Eso es puro boxeo, como Rocky. A Gonzalo Baeza le gusta Stallone
- El charquicán como metáfora del emigrante chileno, porque el charquicán es chileno y como el chileno es la suma de muchas partes, de colores y sabores.
BONUS TRACK
- En “La Furia de los Hombres del Norte” hay una cita a Erich Von Daniken y otra a J.J. Benitez. No sé si Gonzalo Baeza cree en marcianos, pero yo si y con esa cita (que a estas alturas es folklore) se ganó mi corazón. Y el de ustedes también.