Por Daniel Rojas Pachas. Texto de presentación de la novela «Namazu», de Rodrigo Ramos Bañados, en la Feria Internacional del Libro de Santiago FILSA 2013.
La novelística de Rodrigo Ramos Bañados -«Alto Hospicio» (Quimantu 2009), «Pop» (Cinosargo 2010) y «Namazu» ( Narrativa Punto Aparte, 2013)- es, a esta altura, un referente y piedra angular de la escritura en el norte. Quizá Rodrigo no lo ha mesurado aún, pero sus obras han moldeado la visión de una generación fronteriza de poetas y narradores post ’90 que no nos reconocemos en la agotada mistificación de la pampa y la nostalgia de la épica salitrera y sus fantasmas. Todo lo contrario, hablo de escritores que nos identificamos y reflejamos en la estética que, de manera consciente, Bañados ha ido proponiendo e hiperbolizando con personajes como Ceballos, también conocido como el psicópata de Alto Hospicio; Alaska, el delirante protagonista del relato gonzo «Pop»; y en «Namazu», la novela que nos convoca, el par de japoneses, Ronald el liguero fascista, Magda y la mujer gallina. Todos símbolos de lo abyecto, súmmum del tráfico humano y las nomadías erráticas en el desierto más árido del mundo. Atmósfera en que la violencia agazapada bulle como un trasunto de la xenofobia y el chauvinismo en eriales que se desdibujan desde Arica hasta lo más profundo de Atacama. Sigue leyendo


